Lo primero que debes saber es que
el sistema de tinta continuo no es un
método ilegal.
En palabras simples, su
funcionamiento es similar a cuando apretamos un gotero con líquido, al apretar
la goma, caen las gotitas de líquido y se crea un vacío que hace que entre
nuevo líquido ocupando el lugar del aire.
Un sistema de tinta continua se
compone de las siguientes partes:
Depósito
externo o tanque: es un depósito dividido por colores (generalmente negro,
cian, magenta y amarillo). Este depósito es especial, ya que se encuentra
presurizado, por lo que la presión con la que sale la tinta del tanque es
siempre la misma con independencia de la cantidad que contenga. Al ser también
hermética, es difícil que la tinta se seque dentro del tanque.
Cartuchos
de tinta.
Mangueras:
son unos tubos flexibles por los que va circulando la tinta hacia los cartuchos.
Filtros
de aíre: para evitar la filtración de partículas a
los depósitos.
El sistema es bastante sencillo.
La tinta sale del tanque, que tiene un filtro de aire para evitar que entren
partículas no deseadas, gracias a su presurización, este depósito suministra tinta
a través de la manguera aunque baje el nivel. Una vez llega al cartucho, este
se encarga de distribuirla por el papel a imprimir.
Ahora te preguntarás ¿cómo me ayuda instalar un sistema de tinta
continuo? La principal ventaja es que tendrás
un ahorro de hasta el 90% de costo por impresión ya sea en negro o color
manteniendo la calidad. Solo consumes tinta, no cartuchos.
Dirás, muy bien, pero todo
lo que se ve bien no es tan bueno. Obviamente todo tiene sus ventajas y
desventajas. Ciertamente debes saber que si instalas un sistema de tinta
continuo tu impresora perderá la garantía con el fabricante y con el proveedor,
pues tu impresora deberá desmontarse y sufrirá
algunas modificaciones menores en la carcasa para poder instalar las
mangueras.
Otra cosa que debes saber es que
si decides instalar un sistema de tinta continuo deberás utilizar tu impresora con frecuencia (mínimo 3 o 4 veces por semana) para evitar que los cabezales se
obstruyan, mantener los tanques con al
menos 2 centímetros de tinta para asegurar que el aire compense la presión
y pueda enviar tinta a los cartuchos; vigilar
que las mangueras siempre tengan tinta ya que si se queda vacía se puede
llegar a quemar el cartucho.
Y ahora ¿qué opciones hay en el mercado venezolano? Esta información la ampliaré en próximas publicaciones.